El microbioma intestinal está formado por bacterias, virus y otros microorganismos que viven dentro de nuestro cuerpo.
Bacteria vive dentro de su sistema digestivo y se llaman el microbioma intestinal.
Su microbioma lo ayuda a digerir sus alimentos y lo mantiene saludable, pero a veces puede enfermarlo.
El microbioma intestinal también está afectado por los alimentos que consume y los medicamentos que toma.
Un microbioma sano no es dañino y no te enferma.
El microbioma se ha relacionado con afecciones como la enfermedad inflamatoria intestinal, la obesidad, la diabetes y las enfermedades cerebrales.
Los nutrientes y químicos que producen ingresan al torrente sanguíneo y pueden llegar al cerebro. El cerebro dirige su digestión a través del sistema nervioso.
Ahora científicos creen que el cerebro también reacciona a las señales enviadas desde el intestino y sus bacterias. Una interrupción de esta relación puede provocar problemas de salud.
Muchos pacientes con enfermedad de Parkinson sufren de trastornos digestivos, principalmente estreñimiento. Estos problemas muchas veces ocurren décadas antes de que se diagnostique la enfermedad.
Algunos investigadores han sugerido que la enfermedad de Parkinson verdaderamente comienza en el intestino y luego pasa al cerebro.
Al explorar los microbiomas de Parkinson, podemos aprender cómo nuestros cerebros y nuestro intestino funcionan juntos e informar los tratamientos futuros.
La información que recopilemos se sumará a investigaciones anteriores para crear una imagen más completa de la enfermedad y posiblemente descubrir nuevas terapias.
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